Gaizka's Music!!!

Directos desde las antípodas, vuelven, y con más ganas que nunca, la curiosa formación, Cut Copy , que, tras un largo periodo en silencio, tras aquel Bright Like Neon Love , han decidido sacar un nuevo largo, y la verdad es que han tenido tiempo de sobras para preparar algo grande. Para los que no conozcan a este trío, deben saber que se trata de un grupo australiano, al igual que los archiconocidos The Presets , otros que tal bailan, y cuya música fusiona elementos venidos de la new wave, el punk, el funk o el electro, e incluso emana cierto sabor a french groove y a disco añejo, siempre con un aire amable y hedonista, como pocos consiguen. Hasta ahora, esta formación se había prodigado poco en cuanto a actividad productiva, si no tenemos en cuenta el Fabriclive 29 del 2006, cuya realización cayó en sus manos, y donde reflejaban ese amor hacia los estilos musicales donde la calidad y la diversión confluyen sin necesidad de sacrificar una de las dos. Su nuevo largo, de titulo In Gh

Howe Gelb nos entrega después de muchos años un nuevo disco de Giant Sand , con los mismos ingredientes de siempre, ese rock fronterizo que tan bien asimilaron sus antiguos compañeros de banda Joey Burns y John Convertino (ambos de Calexico , para los despistados) y que tan buenos resultados le ha proporcionado a quien hoy muchos consideramos uno de los máximos exponentes del rock independiente. Esta vez sin el fallecido Rainer Ptácek , pero con tres enormes músicos daneses, Thoger T. Lund (bajo), Peter Dombernowsky (batería) y Anders Pedersen (guitarra slide), que perfectamente podríamos pensar que han nacido en Tucson tras escuchar el disco, Gelb de nuevo ha conseguido un trabajo redondo, portador de ese empaque divino que actualmente pocos artistas emblemáticos consiguen darle a sus obras. Si Calexico en su último trabajo, Carried to Dust , tiran de amigos como Depedro o la prescindible Amparo (Amparodeamparanoia, como dirían en Muchachada Nui), Howe escoge mucho mejor sus ami

La vida se nos escapa tan rápido que apenas nos paramos a pensar que tenemos la obligación moral de disfrutarla. O de vivirla, como prefiráis. Y Mark Eitzel , uno de los hombres compungidos por excelencia de la música de los últimos 20 años, está mayor. Y lo sabe. De hecho, se agarra a la vida como a la barca de la bellísima portada de The Golden Age , el último disco de American Music Club . Mark lleva ya mucho tiempo buscando salvavidas al paso del tiempo y hablando, mientras lo encuentra, de las zonas negativas de su vida. A estas alturas, ya no puede cambiar. No cuando vuelve a estar con los viejos colegas con los que cantó al whiskey, a la amigas muertas, a las partes más oscuras de sus partículas elementales. En su nuevo disco se le siguen cruzando desgracias personales, historias de derribo moral, pastillas, cuartos de baño donde se hacen rayas y algún que otro muerto.

A la muerte de Henry J. Darger , en abril de 1973, su casero se aventuró en el interior de su vivienda para descubrir maravillado las 15.154 páginas y más de 300 acuarelas que conforman “The story of the Vivians girls, in what is known as the Realms of the Unreal, of the Glandeco-Angelinian War Storm, caused by the Child Slave Rebellion” , obra magna de Darger que nos cuenta la historia de la lucha que se libra en el planeta Abbiennia entre las siete Princesas Vivian (y las niñas de su reino) y los soldados Glandelinians que las intentan esclavizar. De esa fantasía convertida en cima del outsider art americano tomaron su nombre Vivian Girls , encarnación musical de Cassie Ramone , Kickball Katy y Frankie Rose (sustituida en tiempos recientes por Ali Koehler ), tres jovenes de Brooklyn entregadas a una suerte de noise-pop-punk reduccionista y lo-fi que exhibe parentescos tanto con la escuela C-86 británica como con los garajes-escupe-sonidos de una Olympia dedicada durante l

Christian Fennesz es uno de esos seres híbridos entre lo orgánico, lo electrónico y lo digital. Su batalla musical se libra entra las teclas de su laptop y las cuerdas de sus guitarras acústicas y eléctricas . Ese escenario épico convertido en sonido mágico y extraño ha sido una de las últimas vibraciones que han llegado a mis oídos, impactándolos doblemente, en lo meramente acústico y en lo complicadamente emocional. Lo suyo es un impresionismo sonoro oculto tras una cascada efervescente de sonidos distorsionados sin sentido. Y lo de cascada literalmente, porque a mi su música me parece muy húmeda y gélida. IDM , electrónica conceptual o cómo digitalizar hasta el extremo una guitarra. Experimentos sonoros en manos de este austríaco que ya figura entre los grandes de la música experimental y que ya cuenta en su lista de colaboraciones con nombres como los de Jim O’Rourke , Sparklehorse o Ryuichi Sakamoto , entre otros. Ya se ha pasado en alguna ocasión por nuestro país y entre sus

Ian Curtis , líder de los Joy Division , se quita la vida, colgándose del techo, el 14 de Mayo de 1980, después de ver " Strotszek ", de Werner Herzog , y de escuchar el espléndido " The Idiot ", de Iggy Pop . El resto de la banda, lejos de separarse, retoma el camino, y se reinventa bajo el nombre de New Order , con cierta aproximación a la música techno y electrónica, (ritmos que predominaban en la discoteca Factory, perteneciente a la discográfica que les respaldaba, del mismo nombre), pero sin olvidar sus raíces New Wave . Saltaremos casi nueve años, para plantarnos ante este buen disco de New Order . Su nombre, " Technique ", en el que techno y New Wave se reparten temas a partes iguales. Cajas de ritmos y sintetizadores típicos de pistas de baile, voces modificadas por máquinas, y cómo no, tiernas melodías New Wave muy similares a bandas como The Cure , predominan en un disco repleto de buenos temas como " Love less " o " Round &

Este álbum es la más reciente recopilación del grupo, y fue lanzada por Universal Music el 20 de noviembre del 2006. Como su nombre lo dice, este disco contiene varias canciones que fueron hits #1 en muchos países, en la época activa de ABBA . Para gente sin prejuicios que sepan disfrutar al máximo con melodías irresistibles, estribillos majestuosos, armonías vocales, inocencia conceptual con ramalazos camp y diversión a raudales ABBA es lo más grande que ha parido madre en la estrambótica década de los 70. Es euro-pop 70’s en su máxima expresión con Phil Spector como luminaria de Benny Anderson y Bjorn Ulvaeus , hacedores de ultrapegadizas y lúdicas canciones dedicadas al baile y baladas de sentida manifestación sentimental, composiciones muy bien trabajadas a nivel arreglos y producción con una ejecución imponente, en donde destaca un sabio tratamiento rítmico, la maestría en la gradación emocional, letras adecuadas y una habilidad innata para la creación y sofisticación melód

Isobel Campbell debutó con su nombre en disco grande con aquel maravilloso “ Amorino ”, un disco exquisito y muy recomendable del que Margo Guryan o Françoise Hardy quedarían la mar de satisfechas. Posteriormente hizo equipo con su Lee Hazlewood particular, Mark Lanegan , en un proyecto interesante en el cual Isobel llevaba el peso casi absoluto en la composición. Con este “ Milk White Seets ”, retoma las grabaciones como solista arrimándose más que nunca a su faceta más folk. El disco, con la mitad de las piezas propias y la otra mitad revisitaciones de melodías tradicionales, es tan melancólico, íntimo y sofisticado, con un trabajo exquisito en arreglos, como monótono y en consecuencia, aburrido, a pesar de reflejos de sonidos de gente tan significativa como Shirley Collins o Sandy Denny . Las piezas, todas ellas calmosas, poseen una sonoridad de guitarra acústica como principal referencia musical, con voz suave y apacible, a ratos embelesadora, y otros instrumentos, además de la

Richard Fearless empieza su andadura como DJ a principios de los 90, aunque en 1994 decide dar forma a sus aspiraciones como productor mediante el proyecto Death in Vegas , junto a su amigo Steve Hillier . El dúo se toma su tiempo para preparar sus canciones, con muchos samples de guitarras y baterías. Finalmente, su debut aparece a principios de 1997, un álbum que lleva por título Dead Elvis . Aunque pasa prácticamente desapercibido, el single Dirt y su beat químico se deja ver bastante por MTV . Tatuajes, rojo sobre negro... tal vez lo vendan como electrónica, pero la estética no engaña: Death in Vegas se basan en cimentos rockeros, desde su imagen hasta el material que utilizan para elaborar sus creaciones. Hay programación y ritmos infecciosos, pero también guitarras sampleadas con reminiscencias noise, cuyo resultado final está más próximo a Spacemen 3 que a The Future Sound of London . El single Dirt obtiene un éxito moderado, aunque también destaca la inagural All that Glitte

La escena neoyorquina nos ha dado en los últimos tiempos motivos musicales suficientes como para volver a confiar en ella. Uno de los grupos más innovadores salidos de la Gran Manzana en los últimos tiempos ha sido Gang Gang Dance , una banda que practica un rock avanzado, con influencias clásicas y melodías experimentales al nivel de otros grupos como Animal Collective . Sin embargo, lo peculiar de Gang Gang Dance es el mestizaje y el vanguardismo que desprende su último lanzamiento 'Saint Dymphna' (Social Registry/Warp, 08), disco que representa a la perfección el caos de Nueva York. 'Saint Dymphna' podría parecer a primera vista un álbum difícil de digerir. Sin embargo, su escucha se hace más amena de lo que en un principio podíamos pensar. Desde la primera a la última canción destaca el uso ambiental de la electrónica, y el predominio de unas bases rítmicas tan características que tienen ya el sello inconfundible de Gang Gang Dance . El álbum empieza con &